CÓMO PREPARARLO

Hacer chai en casa es un momento único que transforma tu rutina diaria. En solo unos minutos, puedes crear una bebida cálida y reconfortante, llena de sabor y aromas especiados. Este breve ritual te permite desconectar y disfrutar de un instante para ti. A continuación, te muestro lo fácil que es preparar tu propia taza de chai, perfecta para cualquier momento del día.

¿Qué necesitas?

Para hacerlo de la manera tradicional: un cazo pequeño, un colador pequeño y una taza.  

1. En un cazo, añade 1 taza de agua hirviendo y 2 cucharaditas de SOLO CHAI

2. Hierve a fuego medio durante 3 minutos

- Si usas:

 Leche vaca: añade ½  taza y deja a fuego medio hasta que empiece a hervir

 Bebida vegetal: añade 1 taza, deja que se caliente pero sin que llegue a hervir

3. Endulza al gusto, cuela en tu taza favorita 

Es fundamental tener en cuenta que esta es nuestra recomendación, pero la versatilidad de la mezcla te permite adaptarla a tu propio gusto. Si añades más mezcla, el chai será más intenso; si agregas más agua, obtendrás una versión más ligera. La leche, por su parte, proporciona cremosidad y densidad. Te sugerimos preparar una taza siguiendo nuestras instrucciones y, a partir de ahí, personalizarla a tu preferencia.

En cuanto al endulzante, es completamente opcional. Generalmente, las bebidas vegetales requieren menos, pero si optas por leche de vaca, un toque de endulzante puede ayudar a equilibrar y resaltar los sabores. Al final, la elección es tuya. ¡Disfruta experimentando!

Para hacerlo en forma de infusión: un colador de té y una taza o tetera.

Pon 2 cucharaditas de SOLO CHAI en el colador de té y mételo en la taza o tetera, añade agua hirviendo y deja infusionar durante 5 minutos, añade leche o bebida vegetal si lo desea, endulza al gusto. 

Chai latte estilo cafetería: hierve o infusiona 2 cucharaditas de mezcla de SOLO CHAI en agua hirviendo durante 3 minutos. Añade ahora el endulzante si lo deseas. Haz tu propia espuma de leche o bebida vegetal con una máquina espumadora o un pequeño batidor de mano. Para las bebidas vegetales, un buen truco es añadir una o dos gotas de un aceite de sabor suave, lo que aporta la grasa necesaria para lograr una emulsión más cremosa. Añade la espuma a tu "concentrado de agua y chai" y espolvorea canela o cacao por encima. 

Chai cold brew: pon 2 cucharaditas de chai (sirve tanto el de té negro como el de rooibos) en un bote o botella con agua mineral o filtrada a temperatura ambiente y dejarlo reposar en la nevera. Para el té negro, déjalo de 8 a 12 horas; para el rooibos, de 12 a 24 horas. Cuando pase el tiempo, cuélalo y si quieres, añade un poco de endulzante. También queda genial con unas rodajas de lima, limón o fruta como melocotón o albaricoque. Si prefieres, ponle hielo, aunque recuerda que el hielo puede rebajar un poco el sabor.

¡Hazlo como más te guste, lo importante es que disfrutes de tu momento chai! 

PONTE EN CONTACTO

ASISA

A Asisa le gusta tomar el chai con bebida de avena barista y miel. Le gusta prepararlo a media mañana mientras trabaja y organiza el resto del día. Le encanta hacerse siempre más cantidad por si le apetece otra taza por la tarde o si viene alguien tener chai para ofrecer.

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FATIHA

A Fatiha le gusta tomarse el chai con leche de avena, considera que su dulzor es suficiente y no agrega edulcorante. Le gusta disfrutarlo cada mañana mientras se prepara con su familia para empezar el día.

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¡ANÍMATE!

Ahora que conoces la magia detrás del chai, ¿te animas a probarlo? ¡No esperes más para experimentar esta increíble bebida!